martes, 3 de febrero de 2009

Quito en su eterna primavera
















Así la encontré a Quito, florecida como siempre, sonriente y armoniosa. Parece desconocer de las nostalgias del otoño, es que en verdad no lo conoce ya que vive en su eterna primavera.





Alquilamos una habitación por 5 dolares cada uno en el casco antiguo de la ciudad y durante 2 días la recorrimos en todas las direcciones. Como siempre nada a cambiado, sus tardecitas de lluvia siempre tienen algo para decir al ocultarse el sol, el colorido de su gente y su alegría tratan de apasiguar la imponente pobreza en la que se encuentran, la desigualdad social golpea cada ves mas fuerte a este país dolarizado.





Caminamos por rincones donde el turista no entra... "los barrios". Ahí encontramos personitas de todas las edades, estofados de papas en las esquinas, el pastoreo de un cerdito glotón a punto de caer por la ladera de las empinadas montañas, los pibes que juegan a la pelota y los almacenes de barrio con sus paredes comidas por la humedad.





Desidimos visitar el monumento de la mitad del mundo, donde se encuentra la linea del ecuador que separa ambos hemiferios. Un fiasco, pero igual me tome la clásica foto jajaja.





El día jueves a las 20 hs partimos rumbo a Riobamba. El objetivo llegar hasta Alausi viajando en el techo del tren andino. El resultado la decepsion al enterarnos que por las lluvias el tren grande tuvo que ser apartado de las vías y cambiado por uno mas pequeño, con lo cual nos quedamos sin pasaje. Por suerte un bus nos llevo hasta Alausi donde compramos el pasaje hacia la Nariz del Diablo. Es una montaña Andina muy pintoresca que en tiempos pasados comunicaba a Riobamba con Guayaquil. En la actualidad solo se realiza este pequeño tramo con fines turísticos debido a los numerosos derrumbes que ocurrían y a los actuales medios de transportes.





Viajamos durante una hora y media en el teche del tren entre nubes y acantilados. Es una experiencia que siempre quise hacer y gracias a Dios lo he cumplido... !!!! VIAJE EN EL TECHO DE UN TREN POR LOS ANDES!!!.





1 comentario:

Anónimo dijo...

santi!
una experiencia inolvidable la de viajar en el techo de un tren, como una vez dijimos que asi lo haríamos en la amazonia boliviana... pero también rescato el poder conocer "los barrios" como vos lo llamaste, ver la cara escondida de la ciudad, pero que revela toda su identidad, desenmascarar el circo armado para el turística con cámara digital y adentrarse en las venas sangrantes de américa latina...

un abrazo hermano

te esperamos siempre